Sistemas Contra Incendio.

¿Qué es un sistema contra incendio?

Los sistemas de incendio, están pensados para salvaguardar vidas e instalaciones de trabajo, para lo cual están considerados como hidráulicos, agentes limpios y bióxido de carbono. A continuación se describen las características de cada uno de ellos:

Estos sistemas están integrados por una cisterna para el almacenamiento de agua, área para bombas y una red de tubería para la distribución del agua hacia las zonas afectadas por el fuego.

Asimismo, se utilizan accesorios para una aplicación más dirigida como los rociadores de aspersión, hidrantes con manguera, boquillas, monitores válvulas de diluvio. Estos tipos de sistemas por lo regular son activados en forma mecánica cuando son del tipo húmedo y en forma eléctrica cuando son del tipo seco.

Generalmente se utilizan para la contención del fuego y extinción en casos de que no sean fuegos químicos.

Cuando se trata de fuegos derivados de hidrocarburos y químicos estos tipos de sistema son utilizados como de contención para evitar que estos fuegos se propaguen, dentro del agente extintor que se usa son las espumas tipo fluoroproteicas.

Algunos ejemplos de los sistemas hidráulicos son:

Sistemas de hidrantes y rociadores.
Sistemas de diluvio y niebla.
Sistemas de Afff.

Este tipo de extinción se utiliza por lo regular en áreas ocupadas debido a que la particularidad de estos gases es que no causan daño alguno a la salud debido a que se diseña la cantidad del gas para cubrir el área a proteger, es muy eficaz y seguro. El único detalle es que el área a proteger siempre deberá ser cerrada para que la descarga sea por inundación total, es decir, el área protegida será inundada en su totalidad.

Algunos ejemplos de los sistemas hidráulicos son:

Sistemas Novec.
Sistemas FM200.
Sistemas Ecaro 25.

Este gas es muy eficaz en la extinción de incendios eléctricos, ya que su composición es completamente dieléctrica.Su utilización podrá ser en forma local (áreas abiertas), como en inundación total (áreas cerradas), aunque es muy eficaz para la extinción de incendios.

Este tipo de extinción no es posible utilizarlo en áreas tripuladas ya que causa asfixia debido a que desplaza el oxígeno al punto más bajo de concentración para evitar la ignición.